Esa
tierra amada de Bolívar, la del Pantano de Vargas y Boyacá, la del Gloria
inmarcesible y el júbilo inmortal, la de Gaitán y Jaramillo, esa tierra hermosa
del aguardiente Caldas, del canto del tolimense, de Garzón y Collazos, de la
Changua y la arepa de huevo, del sentir vallenato y el sublime acordeón... Cómo
duele la Colombia de mis ancestros, perseguidos y desplazados, aquella de la
gente que se rebusca sin quebrar su voluntad... Como me duele esta tierra de
Saulito y María de la O... Como dueles Colombia bella... orgullosamente mi
segunda patria... Como duele la sangre derramada en más de cincuenta años de
guerra... Como dueles mi Colombia Humana... aquella que siempre sueña con la
brisa fresca de la libertad... OLPA
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